Arte neocomercial

¿Qué es el arte? Pues esto dependerá, como casi siempre, de a quién se le pregunte. Pero sin entrar en la innecesaria polémica y sin mencionar a los Medicci, creo que se podría decir que el arte es toda aquella manifestación creativa que resultando (o no) atractiva para la percepción humana siempre tiene un mensaje o la necesidad de manifestar “algo”.
Pues bien, quedando claro lo anterior, con ocho mil matices claro, es evidente que cada vez, y con ayuda de la tecnología, el arte experimenta más y más formas de manifestación. Una de ellas es el packaging.

¿Qué es el packaging? Pues esto dependerá, como casi siempre, de a quién se le pregunte. Pero se podría decir que el packaging es el “envoltorio” del producto. Es decir, la caja, el bote, la bolsa, la botella, el tarro que contenga el producto a vender. En la actualidad, el mundo de la cosmética es uno de los más beneficiados de este nuevo arte que es el packaging. Basta con pasearse por la planta de cosmética de unos grandes almacenes para apreciar “in situ” la majestuosidad y efectividad del packaging. Ya que el 93% de las compras de estos productos son por la estética de los mismos, es decir, lejos de escoger un olor, un color labial, un gel de ducha, unas sales, una espuma para el cabello o una crema hidratante lo que pretendemos escoger es la imagen que queremos proyectar en los demás y esto viene dado, entre otras cosas, por el packaging del producto.

¿A qué huele el Classique de Gaultier? Pues esto dependerá, como casi siempre, de a quien se le pregunte. Pero se podría decir que huele a sensualidad, porque el bote es el cuerpo de una mujer con un sexy corsé...